The Secret Word

Todo el mundo tiene días malos, épocas un poco más tristes… y siempre se desea que todo acabe, que pase lo más rápido posible… y como me dijo mi amiga Irene… nunca lo hace. Miras el reloj, y apenas han pasado 2 minutos de la última vez que lo hiciste, tus días se resumen en horas mirando el techo de la habitación, y horas con la cabeza metida en la almohada… no hay nada que haga que el tiempo avance… Pero llega un día, y consigues librarte de aquello que te pesaba, lo que te impedía sonreír; y sientes que entonces empieza otra vez la vida, TU vida, con sonrisas y ganas de gritarle al cielo que nada, absolutamente nada va a borrar la felicidad de tu rostro. Un simple “ey, holaa (:” ha sido lo suficiente para ese cambio… si el día de mañana se desarrolla como debe, se acabaron las malas rachas. Que vuelvan las tardes mirando al infinito para pensar solo en las cosas buenas, que siempre, siempre, siempre están con nosotros… los amigos, las circunstancias, las máas insignificantes tont

Me he decidido a coger la bici hoy, y he llegado a parar al lugar del que guardo más recuerdos. Por aquél entonces era más pequeño… nací allí de hecho. Toda mi vida pasó en aquel lugar, como una gran rutina, que acababa cada noche y volvía a comenzar al despertar… Es esa rutina la que hoy me ha hecho sonreír. Sonreí simplemente recordando todos los momentos vividos en cada esquina; todas las flores cortadas, o las piedras tiradas mientras esperábamos el autobús; aquellas carreras en el parking del lidl o, simplemente los paseos con la bici en las tardes de aburrimiento… Mientras sonreía, me daba cuenta de lo mucho que había vivido allí, y de que no me venía a la mente ningún momento triste, aunque sin duda también los había tenido; con lo que me quedó muy claro que siempre somos felices, y tenemos razones para sonreír, aunque no queramos verlas. Con el paso del tiempo las cosas malas, que considerábamos importantes, se olvidan, y son las que no teníamos en cuenta las que permanec

Con el tiempo, con los años aprenderás donde puedes colocar tu mano, a quien puedes darla y a quien no, con el tiempo, sabrás ver la diferencia entre amigo, enemigo o conocido, aprenderás a que un alma no se puede socorrer porque sí, sino que, se puede acompañar y quizás así, tengas una mínima oportunidad de ayudarla y de sostenerla en pie para que no caiga. Aprenderás que amar no significa perderse, que los besos no son contratos, ni regalos ni promesas y que cada uno que das, tienen su algo especial, que ninguno es igual al otro, que tienen diferentes colores, olores, estados y que incluso pueden hablar. Con los años podrás aprender que nada es lo que parece, y lo que parece nada es, que caminamos solos y que el ser humano, tiene la capacidad tanto de amar como de odiar. Quizás hasta puedas aprender que estar acompañado no significa que la soledad se haya marchado. Con el tiempo quizás empieces a aceptar tus derrotas y puedas mirarlas a la cara como lecciones de nuestro camino. Apren

Empezaremos por donde hay que empezar, dejando claro que todas, absolutamente todas las personas que pasan por nuestro lado, dejan una huella; desde aquella señora cuyo olor te podía tumbar, hasta el pobre hombre en silla de ruedas… Pero está claro que las huellas de unas nos marcan mucho más que las de otras, hasta tal punto que esa huella puede llegar a confundirse con una parte más de nosotros mismos. A esas últimas, a las que en más o menos grado, nos marcan para siempre, les quiero dedicar unas líneas. Este gran grupo se puede dividir en muchas partes menores, y es, de alguna manera, lo que voy a hacer. Primero me quiero referir a aquéllos que son conocidos, ya sea por accidente o a conciencia, y que con poco que hagan, solo por su sonrisa, o su manera de hablar, son recordadas siempre, aunque éstos son los que se marchan rápido y se suele perder el contacto. También están los que, además de llegar por casualidad, se quedan, y aunque pueden acabar partiendo, su huella nunca se bor

La rutina no existe, cada día nos espera algo nuevo y diferente que vivir, y normalmente, no nos damos cuenta...

Se acaba el fin de semana, como se acabó ya lo vivido en Granada. Apenas 24 horas de viaje juntos... pero tantas cosas vividas, que sería difícil expresarlo tal y como ha sido solo con palabras... No se puede describir lo que se siente cuando conoces a alguien y conectas de tal forma que en dos horas estás durmiendo con él... y tampoco se puede describir el ver a un amigo que hacía años no veías... o simplemente, es complicado expresar todas las emociones cuando te dicen: "nos vamos de viaje". Pero a pesar de eso, se puede explicar todo, de tal manera que cualquiera pudiera hacerse una idea... Ha sido una experiencia única, que podremos repetir, pero nunca volverá a ser igual... llegamos todos, impacientes por ver nuestras habitaciones, y más aún por salir de ellas para comer. Con nuestra hambre saciada, pudimos empezar a, digamos, relacionarnos con los demás. Como siempre, hay de todo, aunque siempre es fácil identificar quienes quieren encontrar más compañía. Esta vez no fu

En vísperas de lo que parece va a ser una experiencia distinta, y de lo que nos está aguardando este fin de semana. Por fin una recompensa real al trabajo realizado durante el curso, por fin un par de días, aunque solo sea eso, para pensar solo en nosotros a la vez que disfrutamos juntos, compartiendo parte de nuestro fin de semana con los demás compañeros de otros lugares, que seguro dejarán una huella en nosotros. Mañana salimos, y volvemos pasado... así que será corto, pero confiemos en que sea intenso. Nuestro "regalo" por apuntarnos a esa presentación friki de física, que iban a dar tanto taaanto trabajo, y que al final acabamos sacando en unos pocos recreos. El regalo por tener esa "ilusión" de apuntarnos a lo que sea! Espero que sea un gran fin de semana, y que podamos recordarlo como "El finde de Granada" durante mucho, mucho tiempo, que solo eso ya dice bastante :)

Sí, leéis bien, mi primera vez. La primera vez que redacto algo que puede leer quien quiera que pase por aquí, que espero que seáis muchos; la primera vez que voy a tener un blog. Aquí espero publicar, como dice el título, un poquito de todo... Algo de mí, algo de mi vida, y en general, cualquier cosa que pueda interesar a alguien. Intentaré actualizar con cosas cada día (o al menos cada dos días) para que, si hay algún lector remoto que sigue esto que hoy empieza, pueda tener cosas nuevas que ver! Nada más, empezaré a publicar en breves!